Los mayas de la antigua ciudad de Edzná emplearon una tecnología hidráulica innovadora para habitar los terrenos inundables durante más de mil quinientos años. El sistema de canales permitió drenar el agua en temporadas de lluvia y llevarla a una laguna que se transformó en una represa. Otro conjunto de canales regaba los campos de cultivo y proporcionaba pescado, además de funcionar como canales de comunicación. Los edificios religiosos y administrativos también contaban con un sistema de desagüe sorprendente.
Con el problema de la alimentación resuelto, la ciudad de Edzná prosperó y se convirtió en una de las principales capitales del mundo maya durante el período clásico. Llegó a albergar a 25 mil habitantes en su época de esplendor.
Ubicado a 55 kilómetros al este de la ciudad de Campeche, el sitio arqueológico de Edzná se traduce como Casa de los Itzaes. El nombre hace referencia a etnias como los putunes y los chontales que vivían en la península de Yucatán. La superficie total del sitio arqueológico se estima en 25 kilómetros cuadrados, y unas 200 estructuras se han descubierto hasta la fecha.
Para los turistas, la Gran Acrópolis es uno de los tres imperdibles del sitio. Esta impresionante estructura alberga la emblemática Pirámide de los Cinco Pisos, así como la estructura Nohochná y los mascarones del dios Kinich Ahau. Los visitantes pueden explorar el sitio arqueológico y aprender sobre la fascinante historia y cultura maya mientras disfrutan de las impresionantes vistas de la selva circundante. Además, los turistas pueden disfrutar de la gastronomía local y participar en actividades como caminatas y paseos en bote por la laguna.
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