Conoce Amealco de Bonfil
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En Amealco de Bonfil, en el sur del estado de Querétaro, se destacan sus fuentes naturales y sus talleres de artesanía de la comunidad otomí. Aquí es donde nació la muñeca de tela "María", considerada Patrimonio Cultural del estado. Hay un museo en su honor y una gran reproducción de la muñeca en la plaza principal llamada "Lele" (que significa "bebé" en otomí), que es conocida mundialmente.
Si nos dirigimos al centro de la ciudad, formado por 20 manzanas, podemos ver la iglesia de Santa María con su piso original de madera y sus respiraderos de bronce. Enfrente del templo, el Jardín Principal atrae la atención por sus diferentes niveles y escalones, desde sus bancas se puede apreciar mejor los portales que lo rodean. La arquitectura y la piedra rosa bien cuidada emulan el centro de la ciudad de Querétaro, incluso con su ambiente bohemio durante la noche.
En la intersección de las calles IV Centenario y Morelos, un edificio con paredes de adobe amarillo aloja la Casa de Cultura, donde se puede aprender todo sobre la cultura otomí, desde su idioma hasta sus bordados en punto de cruz y medicina tradicional. Cerca se encuentra la Casa de las Artesanías, donde se pueden comprar souvenirs de barro o textiles con bordados de colores.
Además, los restaurantes de comida prehispánica son una atracción en sí misma en el Pueblo Mágico de Amealco. Los martes son día de mole rojo con guajolote, una tradición que se originó debido a que los antiguos habitantes del lugar solían cerrar ese día para descansar y comer el platillo en familia. No hay que perder la oportunidad de probar las bebidas típicas, el pulque y los vinos frutales. En el Mercado Municipal se venden carnitas y barbacoa.
Y para aquellos que buscan un lugar para descansar, es posible encontrar habitaciones asequibles y sencillas en el centro del pueblo. Pero si buscas algo más especial, la mejor opción está en los alrededores, donde hay acogedoras cabañas rodeadas de bosques y el hotel temático La Muralla. Este hotel está ambientado en la época de la Revolución Mexicana y permite a sus huéspedes disfrazarse como Adelitas o Pancho Villa. Ofrece una amplia variedad de actividades, incluyendo cabalgatas, rappel, tirolesa y espectáculos nocturnos.
A sólo 20 minutos de Amealco, San Ildefonso Tultepec es el lugar donde florecen los talleres artesanales. Los dueños de estos talleres acogen a los visitantes y les permiten crear sus propias muñecas de tela o moldear arcilla. Además, en esta localidad también se encuentra la iglesia donde la comunidad otomí celebra la llegada del Año Nuevo.
Desde la Ciudad de México se conduce por la autopista México-Querétaro, al llegar a San Juan del Río, hay que seguir la desviación hacia La Muralla y en el kilómetro 29, se encuentra la entrada al Pueblo Mágico.
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