Mexicali, Baja California, es un destino lleno de contrastes que nunca deja de sorprender a quienes se aventuran a explorarlo. Uno de sus lugares más fascinantes es la Laguna Salada. A pesar de su nombre, aquí no encontrarás agua. El cuerpo de agua que alguna vez estuvo lleno proveniente del Mar de Cortés se evaporó a mediados de los años ochenta, revelando una vasta extensión de 60 kilómetros de arena blanca brillante, rodeada por las montañas Centinela, Cucapá y Juárez.
Este lugar resulta hipnótico para los amantes de los deportes extremos, quienes lo visitan para realizar actividades como vuelos en ultraligero, ciclismo de montaña, excursiones en vehículos todo terreno o participar en desafiantes carreras como el "Ultramaratón en el Desierto de la Laguna Salada".
A pesar de las condiciones extremas de estar 12 metros bajo el nivel del mar y con temperaturas que alcanzan los 43°C, la vida persiste aquí con cactus que decoran el paisaje y sirven de refugio para reptiles, insectos y zorros del desierto.
El ambiente de la Laguna Salada, casi apocalíptico, ha sido escenario de escenas de películas como "Resident Evil: Extinción". Para mantener la aventura viva, sigue el sendero bordeado de palmeras que te llevará al cercano Cañón de Guadalupe, donde podrás practicar rappel o escalada.